Cataluña relaja las restricciones por la sequía que afectaban al deporte

Las piscinas se vuelven a llenar en Cataluña. El Govern de la Generalitat ha aprobado hoy relajar las restricciones aplicadas por la sequía en el territorio y dejar atrás la emergencia climática, tal y como ha informado el Ejecutivo en una rueda de prensa.

De este modo, parte del territorio catalán entra en situación de excepcionalidad, la misma en la que estaban estas zonas en verano del pasado año. Este cambio de situación afecta a 202 municipios de catorce comarcas. Se estima que, de mantener la tendencia de los últimos meses, Cataluña no volverá a la fase 1 de emergencia por sequía hasta principios del próximo año.

Esta relajación impacta de forma directa en el sector deportivo catalán, ya que las duchas podrán volver a estar operativas al 100%. Sin embargo, el Govern pide a los operadores que “continúen reduciendo el consumo de agua a la mitad” y añade que, en instalaciones de uso recreativo, el uso caiga un 15%.

En el caso de las piscinas de uso público, aquellas que actualmente tienen agua podrán llenarse, afectando de lleno a centros deportivos, hoteles y centros lúdicos. A las medidas anteriores se suman la posibilidad de regar las instalaciones deportivas que lo requieran, como campos de fútbol, rugby o atletismo.

Las duchas pueden volver a estar operativas al 100% y se pueden llenar las piscinas de uso público

A mediados de abril, la Generalitat de Catalunya aprobó un paquete de ayudas al fitness después de que el sector se viera afectado por las medidas para combatir la sequía que estaba sufriendo el territorio.

El 9 de abril, se reunieron el Departamento de Acción Climática, la Secretaría General del Deporte y la Agencia Catalana del Agua con varias patronales catalanas del sector, entre las que se encontraban la Unión de Federaciones Deportivas Catalanas (Ufec), el Clúster catalán de la Industria del Deporte (Indescat) y la Asociación de Empresas de Catalunya de Actividad Física y Fitness (Adecaff), entre otras, para tratar la afectación del deporte por la falta de lluvia.

El pasado 5 de febrero, el Ayuntamiento de Barcelona trasladó a los gimnasios municipales de la ciudad que debían cerrar una de cada cuatro duchas con el objetivo de ahorrar agua, tras entrar en fase de emergencia 1 por la sequía en Cataluña.

El plan del Govern de Cataluña pasaba por el cierre de las duchas en fase de emergencia 2, sin embargo, el Ejecutivo barcelonés se adelantó a la medida. Además, se prohibió utilizar las duchas de los deportistas federados tras los entrenamientos, quedando restringidas únicamente a los partidos o competiciones.