La Real Sociedad continúa en beneficios, pese a la caída de ingresos por traspasos

La Real Sociedad se mantiene en la senda de la rentabilidad. El último balance de cuentas que presentará la junta directiva a los accionistas vuelve a ser positivo, como viene sucediendo desde la temporada 2008-2009. Este hecho se debe, particularmente, al reparto de los derechos de televisión, su balón de oxígeno para registrar 6,5 millones de euros de resultado neto en 2015-2016, a pesar de no haber realizado traspasos significativos como en los dos años anteriores.

Los ingresos audiovisuales le han reportado al club realista 41,6 millones de euros, un 66,3% más, equivalente a más de la mitad de los 79 millones que en total facturó en la última campaña. La entidad presidida por Jokin Aperribay, además, mejoró en prácticamente todas sus líneas de negocio.

La gira que realizó el conjunto guipuzcoano por Estados Unidos en mayo de este año, dentro de la LFP World Challenge, explica, entre otros aspectos, el aumento de los ingresos por competiciones. En esta partida, que también incluye la recaudación por venta de entradas, alcanzó los 2,35 millones de euros, un 53% más.

Por contra, los ingresos por cuotas de socios y abonados vuelven a caer y se situaron en 7,45 millones, la cifra más baja de los últimos cinco ejercicios. Para este año la previsión es que incluso siga a la baja con un descenso acumulado del 10% respecto a 2012.

En lo que se refiere a los patrocinadores, por vez primera en los últimos años, el club supera los siete millones de euros. Su alianza con la empresa china Qbao y el valor de los convenios que ha ido realizando con empresas de su territorio ha repercutido en este auge. En la lista de socios comerciales, también están la cervecera Keler, Kutxabank, Euskaltel, Kirolbet, Reale, Coca-Cola y Adidas, como proveedor técnico.

El negocio ordinario se vio complementado en 2015-2016 con un ingreso atípico de 11, 3 millones de euros que, prácticamente en su totalidad, corresponde al litigio ganado a Mediapro por la conocida como guerra del fútbol y que se cerró en septiembre del pasado año. Este beneficio ha resultado clave para que el informe de cuentas haya salido positivo. Además, ingresaron 3,12 millones por traspasos, frente a los 30,6 millones del curso anterior.

El grueso de la facturación se destina a sostener la parcela deportiva. La Real Sociedad destinó 40,97 millones de euros al pago de nóminas, un 11,8% más. Mayor aún fue el aumento de las amortizaciones, fruto de la inversión en fichajes de jugadores, que prácticamente se dobló y alcanzó los 11,3 millones. El resto de gastos de explotación ascendieron a 16,9 millones de euros.

Presupuesto récord para 2016-2017

La tendencia alcista de los últimos años continuará esta temporada, para la que Aperribay ha previsto el mayor presupuesto de la historia del club: 74,28 millones de euros en ingresos y un beneficio neto de 2,04 millones. Un paso más para poder acometer un mayor número de inversiones en los próximos años, partiendo por el principal objetivo de esta junta, como es la remodelación de Anoeta.

La Real Sociedad, que tiene una deuda bruta de 40 millones de euros, aportará 36 millones a las obras de ampliación y mejora del estadio, que a cambio podrá explotar hasta 2067. Aperribay confía en que las reformas, que darán inicio en el verano de 2017, permita al equipo comenzar la próxima temporada en su feudo, pero en caso de que este hecho fuese imposible, el dirigente realista pedirá jugar en San Mamés, con el fin de que el desplazamiento de aficionados sea el mínimo posible.

El Athletic de Bilbao, de aceptar, devolvería el favor que recibió por la entidad guipuzcoana en 2013, en vísperas de la inauguración del nuevo estadio rojiblanco, cuando le permitió jugar en Anoeta como local un partido de liga ante Osasuna.