Fitness
Fitness de lujo, hotel deportivo y turismo activo, así es el negocio milmillonario de Equinox
El grupo, que acaba de dar entrada como accionista minoritario al fondo Silver Lake, se apoya en tres marcas diferenciadas que en 2018 facturaron en conjunto 1.430 millones de dólares, un 10% más que el año anterior.
19 feb 2020 - 04:58
No es la cadena de gimnasios que más factura en la cuna del fitness, Estados Unidos, pero sí la que ha logrado un mayor posicionamiento de marca en el sector. Se trata de Equinox, una compañía que nació en 1991 como gestora de gimnasios de lujo y que en la última década se ha convertido en el grupo al que toda la industria mira. Con tres líneas de negocio diferenciadas, busca adaptarse a diferentes públicos y ha logrado seducir como nadie al capital riesgo.
La actividad de la compañía se cimenta en la premium Equinox, que tiene tarifas mensuales de 250 dólares; los boutiques Soulcycle, donde la sesión cuesta 36 dólares y el precio cae en la medida en que se adquieren bonos por más clases, y la low cost Blink Fitness, cuyo precio parte de los 15 dólares. En total, el grupo facturó 1.430 millones de dólares (1.319 millones de euros) en 2018, un 10% más que el año anterior y, entre todas sus marcas, cerca de 300 centros. En los últimos meses ha alcanzado el centenar de clubes de Equinox y de Blink Fitness, y Soulcycle opera más de noventa estudios.
Pionero en la apuesta de clubes boutique en los que la experiencia del usuario se eleva al máximo exponente, Equinox adquirió la mayoría accionarial de Soulcycle en 2011, es decir, antes de que la cadena alcanzara la popularidad que asumió en los años posteriores. Aquel mismo año optó por no limitar su producto al público con poder adquisitivo elevado y lanzó la cadena de bajo coste Blink Fitness, cuya marca ha seducido a la estrella de la NBA, Draymond Green, masterfanquiciado de la empresa. Adicionalmente, también controla los boutiques Pure Yoga y los estudios de running indoor Precision Run.
Equinox fue el cuarto grupo de gimnasios que más facturó en 2018 en Estados Unidos, con 1.430 millones de dólares
Y todo ello, mientras apostaba por otras iniciativas que han imitado cadenas alrededor del mundo: habilitar espacios de coworking en Equinox, lanzar un hotel vinculado al deporte y al wellness en Manhathan, o poner en marcha viajes experienciales y de aventura en Marruecos.
Son proyectos con los que el grupo busca ser coherente con su lema It’s not fitness; it’s life. El motivo por el que decidieron ampliar su cartera de servicios es que “Equinox ya es reconocida en todo el mundo por ofrecer experiencias dentro de las cuatro pareces del club, así que entrar en el sector de los viajes era una extensión natural y casi inevitable para ofrecer una propuesta de estilo de vida”, comentó el presidente y director general, Garvey Spevak.
Es esa propuesta de valor, la que trasciende a la actividad física y al gimnasio, la que ha posicionado a Equinox como uno de los gigantes mundiales de la industria, y la que ha atraído a fondos de inversión que han impulsado su crecimiento en Estados Unidos, Canadá y Reino Unido. La pasada semana Silver Lake se hizo con una participación minoritaria del grupo, en el que L Catterton entró en 2017.
En un momento en que la salud ha pasado a ocupar un eje central en la vida de las personas, la sociedad está más concienciada a la hora de invertir en estilos de vida saludables y activos, y “Equinox quiere jugar un papel central en la definición de esa conversación con los clientes aportando experiencias que anticipen sus necesidades”, comentó Spevak en una entrevista con Forbes.